31-10-2018 | De acuerdo a la encuesta Lima Cómo Vamos 2017, a nivel de Lima Metropolitana, uno de los problemas que menos preocupa a los jóvenes es el derroche de agua potable al ubicarse en un noveno lugar de prioridad (solo un 16% afirma sentir preocupación).

Esta cifra aparenta ser desoladora, pero contrasta con el sondeo de opinión (Calandria; 2018) aplicado a jóvenes universitarios de tres universidades (PUCP, UNALM, USIL), donde la mayoría (42.6%) afirma estar nada de acuerdo con la frase “Nosotros siendo jóvenes estudiantes no podemos cambiar esta situación” (referida a los problemas de contaminación y escasez del agua).

Esto en definitiva evidencia sus ganas de proponer soluciones y motivar cambios en torno a las problemáticas del agua que existen en el país, y necesitan conocer más de la temática para identificar su urgencia. Por ello, iniciamos el Programa de Formación – Acción, donde jóvenes de la Universidad Nacional Agraria La Molina (UNALM) y la Pontificia Universidad Católica del Perú (PUCP) tuvieron la oportunidad de profundizar en el tema de la gestión integrada de los recursos hídricos, y posteriormente compartir y aplicar lo que saben con sus pares y su comunidad.

Dicho programa se ejecuta en el marco del proyecto “Campaña innovadora para motivar cambios de comportamiento para el uso del agua”, iniciativa financiada por Agencia Suiza para el Desarrollo y la Cooperación, que busca promover la adopción de prácticas de cuidado y ahorro del agua entre jóvenes universitarios de Lima Metropolitana.

La Autoridad Nacional del Agua (ANA) cuenta con una metodología de capacitación denominada “Promotores de la Cultura del Agua”, dirigida a actores locales vinculados de forma directa a las cuencas hidrográficas: desde líderes campesinos y sus comunidades, hasta autoridades municipales y regionales. Esta metodología cuenta con 4 competencias que pueden ser certificadas de forma independiente por el Sistema Nacional de Evaluación, Acreditación y Certificación de la Calidad Educativa (SINEACE) luego de rendir una evaluación, lo que implica que, de aprobar la evaluación, el certificado que se recibe es expedido a nombre de la Nación.

Identificando esta oportunidad de trabajo y capacitación para los jóvenes universitarios, se trabajó con la ANA en la adaptación de esta metodología al trabajo con los jóvenes universitarios, seleccionando la competencia de sensibilización como primera competencia a entrenarse durante la campaña 1 – “Tómatelo en serio”.

En este sentido, los chicos y chicas que participen en las capacitaciones estarán siendo preparados para que puedan rendir la evaluación que los certificará como “Promotores de la Cultura del Agua” en la competencia de sensibilización. Esta certificación implica una oportunidad de aprendizaje y especialización para jóvenes universitarios ya interesados en el tema medioambiental y con proyección a desempeñarse en este ámbito, pues tiene la particularidad de ser la única certificación ambiental en recursos hídricos del país.

Cabe destacar que las sesiones del Programa de Formación – Acción serán dictadas por la ANA y Calandria, en un esfuerzo conjunto por preparar a los chicos y chicas para la obtención de la certificación. ANA compartirá sus conocimientos en temas vinculados con la gestión integrada de los recursos hídricos como el ciclo del agua, cuencas hidrográficas, y la cultura del agua, así como la relevancia de la labor del Promotor de la Cultura del Agua. Desde Calandria, se capacitará en temas de comunicación e incidencia, para que los voluntarios y las voluntarias  conozcan el valor y potencial transformador de la comunicación, comprendan la lógica de proceso de emprender una campaña de comunicación y su hoja de ruta, y se aproximen a las intervenciones en espacios públicos.

La convocatoria para ser parte del Programa de Formación – Acción se focalizó en aquellos y aquellas jóvenes que ya pertenecían a colectivos ambientales dentro de su universidad, quienes ya están comprometidos con la temática ambiental y tienen experiencia en la organización de actividades de sensibilización sobre el tema dentro y fuera de sus universidades.

De esta manera, se está trabajando en alianza con Munay – Equipo Interdisciplinario para el Desarrollo Sostenible, la RUA nodo PUCP, y el Grupo Estudiantil de Medioambiente y Recursos del Agua (GEMRA) por parte de la PUCP; y con la Comunidad Ambiental Molinera (CAM), la RUA nodo UNALM, y la Oficina de Gestión Ambiental (OGA) por parte de la Agraria.

Durante la primera semana de capacitación, el equipo del proyecto facilitó un taller de comunicación que tenía por objetivo compartir y validar con los participantes los resultados del sondeo de opinión aplicado a jóvenes de tres universidades de Lima: PUCP, UNALM y USIL, y que indaga en sus conocimientos, prácticas y percepciones en torno al agua.

Asimismo, se presentaron los lineamientos generales de la primera campaña del proyecto, que tendrá especial énfasis en aproximar a los y las jóvenes con el recorrido del agua desde las cuencas hasta los hogares, así como en la comprensión del concepto de huella hídrica y su medición.

En cada sesión realizada en la UNALM y en la PUCP participaron 19 y 7 universitarios respectivamente. En el taller de la UNALM asistieron estudiantes de ingeniería ambiental de diferentes ciclos; mientras que al de la PUCP se presentaron estudiantes de especialidades diversas como Derecho, Ingenierías, y vinculadas con las Ciencias Sociales.

En esta semana también se llevó a cabo la primera sesión de capacitación en comunicación e incidencia donde participaron 15 estudiantes de la UNALM y de la PUCP. En este espacio, los y las jóvenes se aproximaron a distintos enfoques de comunicación, aprendieron la importancia y los tipos de estrategia de comunicación que existen, y conocieron la lógica de proceso a la hora de formular una campaña de comunicación.

Durante las sesiones, se organizó un concurso de lemas en grupos para recoger las ideas y propuestas de los y las jóvenes para la primera campaña. Entre las propuestas destacaron lemas como “No te ahogues en tu huella hídrica”; “Somos 80% agua, x% consciencia… ¡Tú decides!”; “Haz que cada gota valga el largo viaje”. Finalmente, se acordaron qué actividades públicas se organizarán en cada universidad durante el mes de noviembre.

El Programa de Formación – Acción tendrá tres semanas más de capacitaciones y culminará con una semana de intervención donde los estudiantes aplicarán y compartirán todo lo aprendido en sus universidades. ¡Mantente atent@ a más novedades!